29 de octubre, 2009
Un nuevo trabajo sugiere que los amantes del café no correrían más riesgo de insuficiencia cardíaca, lo que contradice hallazgos previos.
Los autores hallaron entre más de 37.000 hombres suecos de mediana edad y adultos mayores, que los bebedores regulares de café no eran más propensos a desarrollar insuficiencia cardíaca que los que rara vez, si lo hacían, bebían la infusión.
Los resultados, publicados en American Heart Journal, se suman a las evidencias de que el café no sería una amenaza para la salud cardíaca, como se sospechaba.
Los estudios que inicialmente habían sugerido que el consumo excesivo de café favorecería la aparición de infartos o de otros problemas cardíacos eran básicamente retrospectivos, es decir que le preguntaban a las personas que habían tenido un infarto sobre el consumo de café y comparaban los resultados con los de quienes nunca habían tenido un infarto.
Pero los estudios más recientes mejoraron el diseño para poder confirmar o no la asociación. Esas investigaciones, llamadas prospectivas, les preguntaron a los participantes sobre el consumo de café y los siguieron en el tiempo para registrar nuevos eventos cardíacos.
En general, los estudios asociaron el café con un efecto neutral o protector sobre la salud cardíaca, precisó la doctora Emily B. Levitan, coautora del estudio.
Pero la insuficiencia cardíaca casi no se tuvo en cuenta para compararla con el infarto, señaló Levitan, del Centro Médico Beth Israel Deaconess, en Boston, durante la realización del estudio. Ahora, la experta trabaja en la University of Alabama, en Birmingham.
Un estudio en el 2001 planteó que el consumo excesivo de café favorecería la aparición de la insuficiencia cardíaca. Halló, entre 7.500 hombres suecos, que los consumidores de cinco o más tazas de café por día tenían más riesgo de desarrollar ese trastorno que el resto.
A partir de ese estudio, una declaración reciente de la Asociación Estadounidense del Corazón (AHA) indicó que el consumo de café elevaría el riesgo de desarrollar insuficiencia cardíaca, pero especificó que se necesitan más estudios para confirmarlo.
Ese documento de la AHA dio lugar al nuevo estudio, precisó Levitan a Reuters Health.
El equipo halló que 784 de 37.315 varones, de 45 a 79 años, desarrollaron insuficiencia cardíaca en nueve años. Los autores no encontraron una relación clara entre el consumo de café que habían indicado los participantes al inicio del estudio y el riesgo individual de insuficiencia cardíaca.
Se desconoce si los resultados son aplicables a varones con cardiopatías. Ninguno de los participantes había sufrido un infarto previo; el daño del músculo cardíaco que causa el infarto es una de las principales causas de insuficiencia cardíaca.
El estudio no incluyó mujeres. Es posible, dijo Levitan, que los resultados difieran en las mujeres, pero eso sería poco probable. |