Un estudio comparativo a largo plazo halla que la clortalidona era la más propensa a evitar la insuficiencia cardiaca y el accidente cerebrovascular
19 de noviembre, 2009
Los diuréticos fiables mantienen su estatus como mejor línea de tratamiento en varones y mujeres mayores con presión arterial alta, concluye una investigación reciente.
La clortalidona, un diurético del tipo tiazida, superó a otros tres tratamientos, un bloqueador del canal del calcio, un inhibidor de la ECA y un bloqueador del receptor alfa, en la mayoría de las áreas, pero sobre todo en reducir la incidencia de accidente cerebrovascular e insuficiencia cardiaca, de acuerdo con los datos más actuales de un estudio de gran tamaño en marcha conocido como ALLHAT (por la sigla en inglés de Ensayo de tratamiento antihipertensivo y reductor de lípidos para evitar el ataque cardiaco).
El ensayo original comenzó en 1994, y participaron más de 42,000 pacientes que tenían hipertensión y al menos otro factor de riesgo para la enfermedad cardiovascular. Los participantes fueron asignados de manera aleatoria para tomar uno de los siguientes antihipertensivos: clortalidona (el diurético), besilato de amlodipina (el bloqueador del canal del calcio), mesilato de doxazosina (el bloqueador alfa) o lisinopril (un inhibidor de la ECA).
El seguimiento a cinco años, que finalizó en 2002, pretendía observar si emergían nuevas diferencias con el uso a largo plazo de estos medicamentos, sobre todo en lo referente a la enfermedad arterial coronaria, la mortalidad total, la insuficiencia cardiaca y la enfermedad cardiovascular.
Los resultados anteriores de ALLHAT habían encontrado que los diuréticos eran tan buenos o mejores que otros medicamentos para la presión arterial en el tratamiento de la hipertensión en pacientes de síndrome metabólico (un conjunto de factores que ponen a una persona en riesgo de enfermedad cardiaca), sobre todo en pacientes negros.
"Ninguno de los medicamentos más recientes fue superior a la clortalidona en reducir la muerte por enfermedad cardiovascular o la enfermedad renal en fase terminal, aunque el bloqueador del canal del calcio fue muy similar", declaró Cushman.
Los accidentes cerebrovasculares fueron mucho más comunes en los participantes negros del estudio que tomaban los nuevos medicamentos, y los pacientes que tomaban el bloqueador del calcio tenían tasas mucho más altas de insuficiencia cardiaca. |