1 de diciembre, 2009
El suplemento herbáceo ginkgo biloba no previene infartos cardíacos y cerebrales, pero un estudio sugiere que reduciría el riesgo de desarrollar una obstrucción arterial en las piernas.
El ginkgo contiene antioxidantes llamados flavonoides, que promueven la salud vascular y también hay evidencias de que el ginkgo, similar a la aspirina, previene que las células sanguíneas llamadas plaquetas se acumulen para formar un coágulo.
Al azar, los autores del nuevo estudio les indicaron a más de 3.000 adultos mayores de 75 años unos 120 miligramos de ginkgo o un placebo, dos veces por día. En seis años, los usuarios de ginkgo no fueron menos propensos que el resto a sufrir un infarto cerebral o cardíaco.
Pero sí tuvieron menos riesgo de desarrollar arteriopatía periférica (PAD, por sus siglas en inglés), que es la acumulación de placa en las arterias de las piernas que reduce el flujo de sangre y puede producir dolor y calambres al caminar.
Eso coincide con estudios previos que habían demostrado que los suplementos de ginkgo ayudaban a los pacientes con PAD a caminar más sin dolor.
Pero aún es muy pronto para aconsejar su uso para prevenir PAD, publicó el equipo en la revista Circulation: Cardiovascular Quality and Outcomes.
Se desconoce por qué el ginkgo tendría algún efecto sobre el riesgo de desarrollar PAD, pero ninguno sobre el riesgo de infarto o de ACV. Para averiguarlo, se necesitan más estudios.
Aunque el ginkgo es de venta libre y se considera seguro, los expertos aconsejan que los adultos mayores conversen primero con su médico antes de usarlo. Los suplementos pueden interactuar entre sí o con otros medicamentos. |