Según los expertos, un factor decisivo clave debería ser que los beneficios superen los riesgos
9 de enero, 2009
Tratar a los pacientes que tienen síntomas de arterias obstruidas podría ser más efectivo ahora que las directrices publicadas por los principales grupos de cardiólogos de los EE. UU. para decidir la mejor manera de proceder. Se dice que los criterios apropiados de uso para la revascularización coronaria (\"Appropriate Use Criteria for Coronary Revascularization\"), que se han publicado en línea y en varias publicaciones destacadas de cardiología, son el primer conjunto de directrices enfocadas en el tratamiento en lugar de las pruebas de diagnóstico.
Las directrices clarifican en qué condiciones deben ser tratados los pacientes de dolor en el pecho solo con medicamentos y terapia o con una combinación más revascularización. Las directrices categorizan a los pacientes según cuatro criterios básicos, la gravedad y tipo de síntomas, los niveles de placa en las arterias, la cantidad de isquemia (el nivel de privación de sangre y oxígeno del músculo cardiaco a partir de pruebas de esfuerzo), y si ya usan medicamentos para el corazón.
Las directrices sugieren la revascularización únicamente si el potencial de mejora de la salud y la calidad de vida supera los riesgos posibles. Las personas que tienen acumulación de placa en menos de tres arterias y una proporción baja del músculo cardiaco en riesgo, experimentan síntomas únicamente durante el ejercicio intenso y no toman medicamentos, no se consideran candidatos para la revascularización.
Según las directrices, la excepción serían las personas que ya toman los mejores medicamentos cardiacos disponibles para combatir los síntomas graves. Según el comunicado de prensa, además de ayudar a los profesionales de la medicina, las directrices también podrían ayudar a las aseguradoras ofreciendo criterios adecuados para que puedan desarrollar políticas uniformes sobre el pago y la preautorización y puedan realizar revisiones de calidad de la atención médica. |