1 de enero, 2010
Evitar las hamburguesas y el pollo frito de las cadenas de comida rápida disminuiría el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2, una condición que está íntimamente relacionada con la obesidad, reveló un nuevo estudio.
Comer regularmente porciones grandes de comida rápida elevada en calorías es considerado como un factor detonante del sobrepeso y la obesidad en aumento en todo el mundo.
Además, "está bien establecido que tener sobrepeso u obesidad incrementa mucho las posibilidades de una persona de desarrollar diabetes (tipo 2)", dijo a Reuters Health la doctora Julie R. Palmer, de la Boston University en Massachusetts.
Según el equipo de Palmer, el IMC de las consumidoras de comida rápida era de 28 o 29 -lo que indica claramente sobrepeso. Ese grupo también aumentó más de peso durante el estudio.
Entre las 2.873 mujeres que desarrollaron diabetes en 10 años, los expertos notaron una mayor probabilidad del desorden ligado con el azúcar en sangre en las consumidoras de hamburguesas y pollo frito, pero no en las de otras comidas rápidas.
La ingesta excesiva de comida rápida explicaba la mayoría de los casos de diabetes.
El equipo de Palmer sugiere que es posible hallar asociaciones similares en varones y mujeres y destaca la necesidad de que se realicen más investigaciones sobre la relación entre la comida rápida y la diabetes, en otras poblaciones. |