La idea de que las vitaminas antioxidantes podrían proporcionar una forma inocua y adecuada de proteger al corazón de las enfermedades podría no ser completamente cierta.
Un estudio dirigido por científicos de New York University School of Medicine (EE.UU.) y publicado en la revis-ta Journal of Clinical Investigation (JCI) señala que "muy al contrario" vitaminas como la E la C y el betacaro-teno podrían elevar la producción por parte del hígado de VLDL que transporta el llamado ´colesterol malo´ o lipoproteínas de baja densidad hacia las paredes arteriales. Así lo han observado los autores del presente trabajo en experimentos realizados en ratones.
Cuando las células se encuentran en situación de estrés oxidativo se producen radicales libres por la conver-sión normal de los ácidos grasos poli-insaturados en peróxidos lípidos que "bombardean" las células.
En el presente estudio se ha descubierto que las células hepáticas reaccionan activando una ruta que des-compone la proteína ApoB100 componente clave del VLDL y de otras proteínas perjudiciales. Al privarse de ApoB el hígado no puede producir estas lipoproteínas dañinas y su secrección en el torrente sanguíneo se reduce notablemente.
Según se ha visto la vitamina E un antioxidante bien conocido evitaba la activación de la ruta de descomposi-ción de lipoproteínas en células hepáticas de ratas y ratones por lo que el hígado destruía menos liproproteí-nas dañinas.
El presente trabajo es el primero que documenta esta relación entre las vitaminas antioxidantes y el colesterol dañino si bien se necesitan más estudios que confirmen estos hallazgos. |