Investigadores sobre la diabetes informan que no dormir profundamente durante apenas tres noches seguidas tiene los mismos efectos negativos sobre la capacidad del organismo de gestionar la insulina como aumentar entre veinte y treinta kilos (44 a 66 libras) de peso.
De hecho, los adultos jóvenes que no duermen lo suficientemente profundo podrían estar aumentando su riesgo de diabetes tipo 2, según un estudio publicado el 31 de diciembre en Proceedings of the National Academy of Sciences.
Según los investigadores, tres noches de sueño interrumpido le dieron efectivamente a los sujetos que estaban en la veintena los metabolismos de glucosa e insulina de quienes tenían tres veces su edad.
Los estudios anteriores han demostrado que no dormir suficientes horas afecta la capacidad del organismo para gestionar los niveles de glucosa y el apetito, lo que aumenta el riesgo de obesidad y diabetes. El estudio actual ofrece la primera evidencia que relaciona la mala calidad del sueño, específicamente la pérdida del sueño profundo o de ondas lentas, con un mayor riesgo de diabetes, según el equipo de investigación del Centro médico de la Universidad de Chicago.
Los investigadores sugirieron que mejorar la calidad del sueño, especialmente para quien están envejeciendo o son obesos, podría ser un paso importante en la prevención de la aparición de la diabetes tipo 2. |