En un estudio de laboratorio, células modificadas con ingeniería muestran promesa para el tratamiento cardiaco
21 de julio, 2009
Un estudio reciente con ratones señala que los investigadores han usado ingeniería genética para alterar células que ayudan a formar tejido de cicatriz luego de un ataque cardiaco para crear un tipo de célula que haga justo lo contrario, reparar el daño al músculo cardiaco.
El equipo de investigación de la Clínica Mayo de Rochester, Minnesota, reprogramó los fibroblastos, las células que tienen que ver con la formación de cicatrices, para que se convirtieran en células madre pluripotentes inducidas (iPS), las células madre que han sido convertidas desde células adultas.
Las células iPS luego fueron trasplantadas a los músculos cardiacos dañados, en donde se injertan luego de dos semanas. Luego de cuatro semanas, los corazones de los ratones habían mejorado en estructura y función, según los autores del estudio.
Según los investigadores, las células iPS mejoraron el desempeño del músculo cardiaco, detuvieron el avance del daño estructural al corazón ya dañado y regeneraron el tejido en el lugar del daño.
"Este estudio establece el verdadero potencial para usar células iPS en el tratamiento cardiaco", señaló en un comunicado de prensa de la Clínica Mayo el Dr. Timothy Nelson, autor del estudio. "Los fibroblastos modificados con bioingeniería adquirieron la capacidad de reparar y regenerar los corazones infartados".
El estudio, sobre el que se informa en línea en la revista Circulation, fue el primero en usar células iPS para reparar el tejido cardiaco. Estudios anteriores habían investigado el uso de las células iPS para tratar la enfermedad de Parkinson, la anemia de células falciformes y la hemofilia A.
Debido a que las células iPs se derivan del paciente, los investigadores anotaron que no hay riesgo de rechazo ni necesidad de medicamentos contra las reacciones. |