6 de marzo, 2009
Un nuevo estudio sugiere que la grasa abdominal excesiva combinada con altos niveles de estrés aumentaría el riesgo de diabetes tipo 2 en las mujeres afroamericanas, que son un grupo desproporcionadamente afectado por esa enfermedad. \"El papel de la obesidad en la aparición de la diabetes tipo 2 recibió mucha atención, pero el estrés sería igualmente importante en ese proceso en esta población de alto riesgo\", dijo la doctora Anastasia Georgiades, del Centro Médico de la Duke University, en Durham, Carolina del Norte. El equipo dirigido por Georgiades determinó la cantidad de grasa en el abdomen de 62 mujeres sanas, sin diabetes y les hizo una prueba de estrés emocional. A medida que las mujeres recordaban experiencias estresantes, el equipo les midió los niveles de azúcar en sangre y epinefrina, que es la hormona de \"lucha o escape\" con la que el organismo responde al estrés. Las mujeres con gran cantidad de grasa abdominal y altos niveles de epinefrina tenían el azúcar alto en sangre durante la prueba y en ayuno. En cambio, las mujeres con poca grasa abdominal y alto nivel de estrés, al igual que las mujeres con mucha grasa abdominal y bajo nivel de estrés, no presentaban cantidades elevadas de azúcar en sangre. No es un misterio por qué el estrés y la obesidad interactúan para elevar el azúcar en sangre, dijo Surwit. \"La epinefrina estimula la degradación de la grasa, lo que promueve la producción de ácidos grasos libres. Esos ácidos compiten con la glucosa como combustible y, así, elevan el nivel de azúcar en sangre\", explicó. \"Si una persona tiene sobrepeso, el estrés interactuará con el peso extra y quizás aumente el nivel de azúcar en sangre\", concluyó el experto. Estos resultados se presentarán en la reunión anual de la Sociedad Psicosomática Estadounidense. |