El bajo peso al nacer seguido de un aumento de peso excesivo durante la infancia y la adultez temprana podrían conducir a una inflamación de bajo grado, lo que a su vez puede aumentar el riesgo de enfermedades cardiacas posteriormente, señala un nuevo informe.
Los investigadores anotaron sus hallazgos en un estudio de 5,840 personas a las que se les dio seguimiento desde su nacimiento hasta los 31 años; sin embargo, entre los participantes aparecieron pocos problemas relacionados con el corazón, debido probablemente a que aún eran relativamente jóvenes. Los investigadores pretenden darle seguimiento al menos durante otros 20 años más.
El estudio finlandés, que se espera sea publicado en la edición del 10 de abril de la revista European Heart Journal, plantea que iniciar un estilo de vida saludable desde el nacimiento podría desempeñar un papel en la prevención de problemas cardiacos.
En su informe, los autores señalaron que "el hallazgo de que el aumento de peso entre la adolescencia y la edad adulta parece jugar un mayor papel en la inflamación de bajo grado que el peso en la adolescencia por sí solo podría tener implicaciones importantes para la prevención primordial de las enfermedades cardiovasculares. El fomento de un estilo de vida más saludable en la infancia y la adolescencia, que podría conducir a la estabilización del peso, podría ser un paso crucial en el establecimiento de un bajo perfil de riesgo cardiovascular en adultos jóvenes". |