DEJAR DE FUMAR REDUCE LOS RIESGOS DE LAS ENFERMEDADES CARDIOVASCULARES
Las substancias químicas del humo del cigarrillo pasan de los pulmones a la sangre, obstruyendo las arterias.
El hábito de fumar duplica la posibilidad de desarrollar enfermedades cardiovasculares, muy particularmente en aquellos fumadores que sobrepasan los 20 cigarrillos diarios. Estos fumadores son de 2 a 4 veces más propensos a sufrir un ataque cardíaco que los no fumadores. Y la proporción de muerte por infarto de miocardio es un 70 % mayor.
El riesgo disminuye rápidamente al abandonar el hábito.
Los ex fumadores tienen menos posibilidades de sufrir un infarto que los fumadores
Les acercamos algunos consejos muy básicos para abandonar el cigarrillo:
1- Antes de abandonar el cigarrillo póngase a dieta con un programa de alimentación sana y controlado por su médico, para evitar la angustia por los kilos de gane al dejar de fumar.
2- Tome nota de cuales son los momentos del día en los que se le vuelve imperativo fumar, y en cuales no. Comience a dejar de hacerlo en los que considera los menos necesarios y, gradualmente, vaya suprimiendo la necesidad en todos los casos.
3- Abandonar el hábito de fumar se puede conseguir en un lapso de 3 a 4 semanas, por lo tanto no pretenda resultados mágicos. Propóngase metas, señálelas en su almanaque y trate de alcanzarlas, gradualmente. También puede llevar un diario en el que anotar sus logros día por día.
4- Mantenga fuera de su alcance cigarrillos y fósforos o encendedor.
5- Aumente el consumo de líquidos naturales para favorecer la desintoxicación. Beba más agua, leche, jugos naturales, pero, disminuya considerablemente el consumo de alcohol, gaseosas y café.
- Beber un vaso de agua reduce el deseo de fumar. La infesta de líquidos naturales, además de reducir el deseo, ayuda a depurarse y le permite llevar más oxígeno a la sangre. El café y las bebidas cola son estimulantes que interfieren en su intento de abandonar el cigarrillo.
- También, las verduras frescas y las frutas secas, que proveen azúcar y agua extra, permiten una mayor purificación y fortalecen el organismo con energía natural.
6- El ejercicio físico permite una mayor oxigenación. También, recomendamos hacer ejercicios de relajación al menos 3 veces al día, y de modo particular, antes de acostarse y al levantarse.
Además de la reducción del riesgo de enfermedades cardíacas dejar de fumar le trae algunos otros beneficios como:
- Una mayor lucidez durante el día, con una mayor capacidad de concentración y atención.
- Un incremento de la resistencia física.
- Recuperación de los sentidos del olfato y del gusto.
- Aumento de la capacidad respiratoria y mayor oxigenación del organismo.
- Un mejoramiento integral de la piel.
- Mejoría en la actividad sexual.
FUENTE:
DURRINGTON, P., Cardiología preventiva.
DAVIDSON, C., Las enfermedades coronarias.
|